Politicamente incorrecto
Después de un verano de demostraciones continuas de la incapacidad absoluta de nuestra clase política al completo nos encontramos una vez más con el espectáculo de la falta absoluta de independencia no sólo de los políticos sino también de periodistas, jueces, fiscales, policías y un sinfín de otros personajes.
En ningún momento las opiniones están basadas en la realidad y en la coherencia sino en el interés partidista de la persona que expone (o vomita) su opinión. Basta cambiar de comunidad autónoma o echar atrás unos años para ver como cambian las opiniones en función de que estemos en el gobierno o en la oposición.
El interés de los partidos políticos no es otro que el de perpetuarse en el poder si lo detentan o en el caso de que estén en la oposición llegar al mismo, jamás se procupan de su verdadera función que no sería otra que luchar por gestionar honradamente los presupuestos y conseguir mejorar la vida de los ciudadanos, a su alrededor han creado una caterva de chupópteros de diverso pelaje que en
Lo peor de todo es que los ciudadanos se lo permitimos y asistimos pasivamente como espectadores y paganos de este circo.
posted by Antonio Castaño @ 4:17 p. m.
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y cada vez estamos más inmunizados, y en lugar de indignarnos parecemmos imbéciles consistiéndolo...
Yo diría un poco más, hermano: no somos espectadores, sino actores, porque somos responsables de los políticos que tenemos.
Esto huele cada vez peor, es tristísimo.
En fin, hermano, tapémonos la nariz y... ¡adelante!
Pones de nuevo el dedo en la llaga, Hermano. Me apeno de ver que no soy lo suficientemente valiente o hábil como para hacer algo, pero mi espíritu me dice que confíe, que "los tiempos están cambiando..." (¿te suena? ;-)))
Un abrazo políticamente incorrecto, pero abrazo, Fray.
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